
Universidad de Harvard:
Rectora Claudina Gay acusada de plagio.
Luis Eduardo Cortés Riera.
No se trata de cualquier persona la que es acusada de grave
delito académico de plagio en una de las universidades más importantes del orbe,
la muy ilustre Universidad de Harvard, fundada en tiempos de las Trece Colonias
Americanas en 1636 y cuyo lema es “Veritas”, a la cual le han sido concedidos
161 Premios Nobel entre sus egresados. Es la rectora Claudina Gay, neoyorkina nacida
en 1970 e hija de inmigrantes haitianos que estudió en Arabia Saudita, Economía en la Universidad de Stanford, y
obtuvo su doctorado en 1998 en Harvard, donde ganó el Premio Toppan a la mejor
tesis y disertación en Ciencias Políticas, primera presidenta de color de
Harvard en 368 años de fundada la institución, la que se encuentra en el ojo del huracán académico y
político en los Estados Unidos en días recientes, después de haber sido
aclamada favorablemente por tirios y troyanos tras su designación rectoral
en 1° de julio de 2023. La luna de miel fue muy breve.
Se le acusa de dos delitos: la de haber usado material
ajeno para redactar su tesis de grado doctoral en 1997, y la de haber expresado
una posición ambigua ante los ataques de Hamás a Israel del pasado 7 de octubre
de 2023. Parece ser que la poderosa comunidad judía de los Estados Unidos
presiona por su defenestración, pues los estudiantes hebreos sufren en esa
eminente casa de estudios de acosos y discriminaciones alentados por el
discurso rectoral “antisemita”.
La cosa no se queda en Harvard, pues ha contaminado a
la Universidad de Pensilvania donde la rectora Liz Magill ha tenido que dimitir
el 9 de diciembre de 2023 por presiones de donantes ricachones. Y otro tanto
acontece en el célebre Instituto Tecnológico de Massachusetts, MIT, donde
enseña desde hace más de medio siglo el célebre lingüista Noam Chomsky.
La Universidad de Harvard absolvió de plagio a su
rectora de tez morena, gruesas gafas, pelo al rape, visiblemente afroamericana.
Las
acusaciones, afirma la Universidad eran "demostrablemente falsas" y
asegurando que todos los trabajos de la presidenta estaban "citados y
acreditados adecuadamente". Esta sentencia favorable a Claudina Gay ha
tenido serios detractores como el del conservador New York Post. Escándalo
mayúsculo pues Harvard tiene el récord impresionante e inigualado de que 161de
sus ilustres egresados que han obtenido el ambicionado Premio Nobel en sus
distintas áreas, un crecido e impresionante 19 % de premios Nobel embolsillados
por los exestudiantes de la universidad situada en Massachusetts. Es que hogaño
el plagio de tesis universitarias es un verdadero tema tabú. No es la primera
vez que él toca a las elegantes puertas de Harvard.
El
pasado 21 de diciembre de 2023 la universidad que da empleo a la politóloga
Claudina Gay volvió sobre el tema del plagio. La
definición de plagio de Harvard parece clara y exigente. “El plagio se define
como el acto de presentar, intencionadamente o no, un trabajo escrito por otra
persona”, dice un manual para estudiantes. Toda fuente,
incluidos sitios web y documentos aparentemente sin autor, “debe citarse
adecuadamente”. La Universidad de Harvard, dice el diario La Nación, encontró dos casos
adicionales de citas insuficientes, complicando la situación de la
dirigente, bajo fuego por distintas acusaciones.
Continua La Nación diciendo que “La presidenta Gay
actualizará su tesis corrigiendo estos casos de citas inadecuadas”, dijo
la universidad este miércoles sobre los hallazgos adicionales.” Harvard Corporation, afirma la cadena CNN,
emitió una declaración conjunta el 12 de diciembre en la que apoyó plenamente a
la Dra. Claudina Gay de 53 años de edad. “El plagio generalmente, dice CNN Business, se divide en dos
grandes categorías: copiar sin atribución y la acusación mucho más grave de
robar las ideas de alguien. El plagio descubierto en el trabajo de Claudina Gay
se ha centrado únicamente en citas descuidadas, no en el robo de ideas”.
Por mi parte hago mías estas palabras de un eminente abogado
estadounidense: “Es parte de este ataque de extrema derecha contra las instituciones de
élite”, que involucra a los extremistas partidarios del expresidente Donald
Trump, quienes sostienen que los estudiantes extranjeros deben abandonar el
país.
Todo parece indicar que el ataque de Hamás a Israel del pasado 7 de
octubre de 2023 y las implacables y desproporcionadas respuestas del estado
hebreo, han tenido hondas repercusiones en los ámbitos académicos de la
potencia del norte. Harvard ha experimentado una caída en picado de sus
aspirantes, se le acusa de racismo discriminatorio, así como ha visto
cuestionada su integridad académica y espiritual en un país que, según el
filósofo estadounidense Morris Berman, no tiene “centro moral”.
Es mi deseo que el panorama confuso de la academia estadounidense se
aclare a la brevedad. Recordemos que deben ser evitados a toda costa sucesos extremos
como los del 4 de mayo de 1970, cuando fueron asesinados por la Guardia
Nacional en el campus de la Universidad de Kent, Ohio, cuatro jóvenes
estudiantes que protestaban contra la muy impopular guerra del lejano Vietnam
que entonces se vislumbraba perdida para los Estados Unidos. Cuatro jóvenes promesas
que se apagaron para siempre desde entonces debido a la intolerancia y la
inflexibilidad de posiciones, que se revela crudamente de nuevo en el alevoso
asalto al Capitolio, Washington DC, el pasado 6 de enero de 2021. El diálogo
sincero, los valores democráticos y pluralistas, sobre todas las cosas, deben
prevalecer a toda costa.